viernes, 12 de septiembre de 2008

Informe del PCOE sobre América Latina

La historia moderna de América Latina está indisolublemente atada a la política exterior de los EE.UU. que para ejercer y mantener su influencia en la región, ha recurrido tradicionalmente y aún hoy lo hace, al ejercicio de las más variadas fórmulas de presión y de opresión: neocolonialismo, golpes de estado, dictaduras, intervenciones militares, creación y apoyos políticos, económicos y logísticos a las subversiones reaccionarias, imposición de gobiernos títeres, etc. Las injerencias imperialistas han provocado en muchas ocasiones, la oposición entre sectores de las clases trabajadoras de los territorios subyugados, que a falta del entroncamiento y del desarrollo de las teorías sociales revolucionarias de carácter científico, han depositado su confianza en sucesivos líderes o grupos vanguardistas, nacidos en estas determinadas condiciones.

                La irrupción de una serie de caudillos “contestatarios al imperialismo” en la palestra política latinoamericana en estos últimos años, ha suscitado expectativas mas allá de las promesas que ellos mismos han jurado. Aunque el fenómeno no es ni nuevo ni sui géneris de esta latitud, en la actualidad y precisamente aquí, adquiere una significación especial por aparecer en el horizonte político “la posibilidad” según el entendimiento muy generalizado entre sociólogos, progresistas y socialistas-comunistas de nuevo cuño, de recurrir al socialismo como solución definitiva. Los últimos acontecimientos acaecidos en Venezuela y Bolivia, especialmente, atraen la atención no solo de la opinión pública de América Latina, también, penetra en el corazón y en la conciencia de la inquietud revolucionaria de los países europeos.

                Lula, Daniel Ortega, Evo Morales, Kirchner, Chávez, son los líderes que mas ilusiones despiertan en estos momentos. Sus seguidores europeos extraen de cada uno rasgos sustanciosos, que nos pueden servir para conocer cuáles son las pautas para acceder al socialismo, que forzosamente nos exigen, deben ser distintas a las que se dieron en los países del este europeo.

                Sin embargo, salvo en el caso de Chávez en Venezuela, ninguno habló de socialismo, tal vez de depurar la democracia burguesa con singulares sistemas de participación ciudadana, tal es el caso de Lula, de nacionalizar las riquezas autóctonas muy concretas, siendo esta medida y no la propuesta de socialismo, lo que llevó a Evo Morales a la presidencia de Bolivia. En Europa la costumbre de extraer conclusiones absolutas de frases y circunstancias aisladas, que se prestan a la confusión, nos hace ver lo que queremos ver y no lo que realmente es. Todos los líderes citados, han prometido luchar dentro de sus países contra el neoliberalismo, seguidamente nuestros cerebros en ebullición, ensartan conjeturas una detrás de otra y especulan con las palabras “revolución” y “socialismo”, ambos conceptos convienen que son antitéticos del neoliberalismo. En Kirchner, Lula, Daniel Ortega y Evo Morales negar el neoliberalismo, es buscar fórmulas distintas a dicha corriente económica y política, pero enmarcadas en el sistema capitalista y nada más.

                Entonces, ¿cómo surgen las esperanzas del advenimiento socialista por Latinoamérica, en las cabezas de revolucionarios y progresistas de Europa? La explicación se halla en que por ahora la revolución socialista en Europa desarrollada, está fuera de toda “lógica” a partir de sus análisis. Los deseos, más que el producto de un examen en profundidad, les lleva a creer, que América Latina arde en el umbral de la revolución socialista y esperan con agobiante necesidad que suceda así, con la confianza de que las revoluciones se extenderán por contagio. Dicho de otra manera, ante su manifiesta incapacidad para iniciar un proceso revolucionario en sus propios países, se entregan a la idealista espera del Mesías venido desde el exterior. Curiosamente, jóvenes y mayores, entre los que incluimos a marxistas-leninistas, asfixiados por el desasosiego, abandonan fácilmente la dialéctica en sus análisis para darle sentido a sus ilusiones.

                Antes de abordar la situación del continente americano, debemos conocer la trayectoria de los líderes señalados con el propósito de evitar equívocos en nuestro partido y entre nuestros simpatizantes. Habrá pues, que situar el presente informe en el lugar adecuado.

 

LULA

                Mirando a Lula y a su gobierno de “izquierda”, observamos que su primer  mandato en el que apostó por la transformación de Brasil, se ha caracterizado por aplicar medidas económicas contrarias a sus proposiciones preelectorales. En tan solo cuatro años ha desvanecido todos los anhelos de cambio que debería haberse emprendido, ya pocos confían en Lula para su segunda etapa.

En la hora presente, mientras, presidentes de entidades financieras acuden invitados a los actos que se celebraron después de su segunda investidura, el episcopado de Brasil, que había contribuido a su elección cuatro años atrás,  le acusa en su mensaje de Navidad de haberse olvidado de los pobres. En Brasil el episcopado se ha manifestado siempre al lado de las organizaciones no gubernamentales, de los sindicatos y especialmente del movimiento Trabajadores Sin Tierra. Las críticas,  provenientes de los católicos son debidas a que según estos, el Gobierno de Lula es la continuación del anterior de Fernando Henrique Cardoso.

                Tras su reelección, Lula no se plantea ningún cambio como se desprende de sus palabras en el discurso de investidura, en el que afirmó que su término preferido fue siempre “cambiar” pero ahora son los verbos “acelerar”, “crecer” e “incluir” para que Brasil crezca más rápido, pasando a ser su objetivo prioritario defender la democracia de la corrupción y del terrorismo. Al respecto propuso a la oposición poner mayor énfasis “por lo que nos une que por lo que nos separa”.
               

EVO MORALES

Con relación a Bolivia, también se suceden las sorpresas. Los EE.UU. considera “la reforma constitucional como un importante paso para la democracia” (Ámbito Financiero, 13/12) ¿Cómo es posible?

La constitución reformada no contempla un solo argumento que haga temblar de miedo el dominio y control de la oligarquía interna, ni que tampoco manifieste la intención de reducir la influencia de los monopolios internacionales.

La parte más avanzada de la constitución se refiere a los límites o dimensiones que han de tener los latifundios, pero no procede a ejecutar su expropiación, además la implantación de la ley queda sujeta a la sanción de un referéndum. La consulta se va a realizar en los siguientes términos ¿Qué extensión de tierra será considerada latifundio, más de 5.000 hectáreas o más de 10.000? Nada más y nada menos que en un país eminentemente campesino, Evo Morales ha dicho que no se va a intervenir los latifundios que estén saneados y sean productivos.

Resulta evidente que las masas trabajadoras no han participado en la confección de la nueva constitución, hecho que niega siquiera la profundización de la propia democracia burguesa, muchos menos, puede significar un indicio de avance hacia una democracia popular y por lo tanto,  más lejos queda el socialismo.

A Evo Morales se le planteaba un problema extremadamente difícil después de que sectores oligárquicos de varios departamentos proclamaran sus propios estatutos autonómicos, desafiando la autoridad del gobierno. Solidarios los gobiernos de MERCOSUR con Evo, han emitido una declaración conjunta de apoyo. Declaración muy oportuna que se complementa con el anuncio por parte de Lula y Bachelet de la construcción un corredor que puede aumentar la producción de gas, etc. Obra colosal, que irá en la idea de unir el Océano Atlántico con el Pacífico, el cual pasará por Brasil, Chile y Bolivia (Oruro, Cochabamba y Santa Cruz) Profundas e importantes iniciativas internacionales, que va a permitir el desarrollo económico superior de las oligarquías internas y multinacionales asentadas en Bolivia, han forzado a que la prensa opositora sugiriera a los autonomistas “ser cautelosos con las acciones, cuando existe tamaña red de protección regional”. He aquí donde se fundamentan los sospechosos halagos yanquis a la nueva constitución.

 

DANIEL ORTEGA

Tal vez el país que estuvo más cerca de abrir surcos hacia el socialismo fuese Nicaragua. El 19 de Julio de 1979 el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) derroca al gobierno de la familia Somoza que ejercía una férrea dictadura.

El nuevo gobierno, llevó a cabo la Reforma Agraria, pero solo parcialmente, porque la mayor parte del latifundio continuaría siendo explotada por el gran capital privado, excepto aquellas tierras que habían pertenecido a la propia familia Somoza y a sectores del pequeño y mediano campesino. También se procedió a la nacionalización de la banca. A renglón seguido el gobierno revolucionario puso bajo su control el comercio exterior.

La reacción norteamericana no se hizo esperar, fue Ronald Reagan quién decretó el bloqueo económico, recompuso la contra y la financió económicamente, a la par que subvertía a los campesinos medios y pequeños despojados de sus tierras, aprovechando el grave error cometido por el gobierno revolucionario.

Todos los pasos dados se situaron dentro del sistema capitalista, sin llegar nunca a cuestionar sus instituciones más representativas, como el parlamento burgués. En 1984 se celebraron elecciones en las que Daniel Ortega salió vencedor por un amplísimo margen de votos.

A pesar de este triunfo, la burguesía continuaría siendo intocable, mientras la contra presionaba militarmente, abundando en la precariedad. Porque la guerra absorbía el 50% del producto interior bruto. Continuaba existiendo la prensa contrarrevolucionaria. Las emisoras católicas manifiestamente contrarias a la revolución, seguían emitiendo en antena.

La oposición militar con sus incrustaciones, la presión de los EE.UU. y la oposición de la burguesía autóctona, obligaron al gobierno sandinista a iniciar conversaciones para un proceso de paz, que acabaría con las elecciones de 1990, en las que la oposición unida y liderada por Violeta Chamorro venció y aniquiló de raíz el proceso revolucionario.

 

KIRCHNER

                El Triunfo de Kirchner en Argentina, en medio de la tormenta económica y política protagonizada por el gobierno de Menen que llevó al país a la bancarrota, presagiaba buenos augurios.

                A estas alturas y tras la sucesión familiar, la Sra. Kirchner, se enfrenta a problemas sociales, que su marido no supo poner fin, porque no emprendió el camino, que al menos, previera reformas populares.

                Subsisten las leyes Banelco, así también, la legislación de la flexibilización de Menen. El salario de la mayoría de los trabajadores está en un 30% por debajo de la exigencia vital, mientras los alimentos suben sin parar. Y por si fuera poco, el Sr. Kirchner que había prometido acabar con el endeudamiento exterior, expiró su mandato dejando al país con una deuda externa que supera el 65% del producto interior bruto. Menen  Argentina continúa estando hipotecada.

                Pero si Kirchner aparentaba un progresismo interno por “solidaridad externa” con los gobiernos más avanzados de América Latina, la realidad era otra, como lo demuestra su persecución a la docencia que ha venido luchando por mejoras salariales y por la educación publica.

                La Sra. Kirchner ha dejado clarísimo en el acto de su investidura que no tiene intención de hacer ninguna revolución, pero tampoco hará políticas favorables a los ricos. En su práctica se traduce en un pacto social con la dirección burocrática de los sindicatos, adoptando medidas de corte dictatorial, como despidos, penalización de la protesta, así como la coacción por medio de grupos provocadores como ya sucediera en el Casino, Segovia, Metrovías, Hospital Francés y otros.

 

CHÁVEZ

                De entre todos los países, Venezuela es el que mas promete. Al fijarse el socialismo como meta, cada paso que de su gobierno en el terreno político y económico, será examinado con lupa por los amigos y enemigos de la revolución.

                El avance victorioso de Chávez, alimentó las esperanzas de la progresía europea contagiando a sectores del comunismo continental, como reconoce el Ministerio de Comunicación e Información del gobierno bolivariano, tras el triunfo en el referéndum celebrado en agosto de 2003 “… Así Chávez y Venezuela se han posicionado con claridad en el campo internacional como el principal proceso de gobierno que lucha, junto a su pueblo, por otro mundo posible. La exitosa acogida en el Foro Social Mundial (FSM) 2003 así lo evidenció. El llamado a construir colectivamente el nuevo socialismo ha activado aún más la atención de la izquierda mundial”

                En aquella ocasión voces consideradas expertas y relevantes en el ámbito de la izquierda y del progresismo, se excitaron en loas al proceso revolucionario, por su pretendida participación del pueblo en la construcción de la democracia “directa”

                “Cautelosa, modestamente, los bolivarianos llaman “proceso de cambio” a lo que están haciendo en Venezuela; pero es una revolución. Carlos Frabetti, escritor italiano. Alianza de Intelectuales antiimperialistas

                “Estoy seguro de que el pueblo venezolano está dispuesto a mantener la legitimidad de su revolución con todos los medios a su alcance, más allá del optimismo de los discursos; pero también más allá del pesimismo de algunos analistas y comentaristas. Alfonso Sastre, intelectual español.

                “Está claro que el principal mérito de este gobierno es, simplemente, haber facilitado que millones de personas tradicionalmente marginadas al extremo participen por fin en la vida política del país”  Paul Emile Dupret, belga. Secretariado del Grupo de Izquierda Unida del Parlamento Europeo.

                “Chávez se ha basado en este pueblo protagónico –las bases como protagonistas- Él sabe que los cambios para los que fue electo sólo pueden hacerse y protegerse con la participación popular” Selma James coordinadora de la Huelga Mundial de Mujeres. Inglaterra.

                “Su victoria es la victoria de millones de pobres y excluidos, de trabajadores, de todas y todos aquellas y aquellos quienes se comprometieron en luchas, muchas veces muy intensas, por un progreso social real contra la ley de las multinacionales” M.G. Buffet. Comité Nacional del Partido Comunista de Francia.

                La fórmula democrática, que espanta a todas las oligarquías capitalistas del mundo, es totalmente distinta: máxima participación, máxima toma de conciencia, máxima implicación de los ciudadanos” En Venezuela, la democracia huele a pueblo” Colectivo Cádiz Rebelde. España.

                Gorbachov, Julio Anguita, Celia Hart, y un sin fin de personajes de moda se muestran en los términos, democracia, revolución, participación del pueblo, defensa popular de la revolución etc. lo que unido al silencio de determinados partidos comunistas, en los momentos cruciales de la “revolución”, primero y segundo referéndum, rechazo al marxismo-leninismo, nos puede dar muestras del envalentonamiento de unos y del acobardamiento de los otros, ante unos acontecimientos que afianzan a los socialdemócratas y que hacían dudar a comunistas. Por fortuna, brota desde las extrañas venezolanas el examen autocrítico y el propósito de enmienda del Partido Comunista de Venezuela, descarnando la realidad de la revolución y la dimensión de la auténtica conciencia del pueblo.

En la cena que con motivo del fin de año, se celebró a finales de diciembre, el diputado del Partido Comunista de Venezuela, Figuera, expuso claramente cual era la posición del partido, después del fallido referéndum, exposición que fue difundida en nota de prensa:

                … El Partido Comunista de Venezuela al igual que el  Presidente Chávez, ha reconocido el resultado del referendo aprobatorio de la Reforma Constitucional “”hay un resultado donde se dice que la oposición nos derrotó, nosotros hemos llegado a la conclusión que NO, el llamado chavismo fue quien derrotó la reforma””
                El PCV llamó a hacer un esfuerzo en el debate por desentrañar el porque sucedió esto, porque una franja del Chavismo fue quien derrotó la reforma a la Constitución “”porque si nosotros no nos obligamos desentrañar las causas objetivas de esos acontecimientos, podemos equivocarnos en la línea política que decidamos desarrollar””, señaló el diputado.

                Para el Partido Comunista la primera gran razón de la NO victoria, tiene que ver con el nivel de desarrollo de la conciencia efectiva del pueblo.

                Figuera expresó que la conciencia política del pueblo venezolano ha avanzado en estos 8 años de gobierno “”es una conciencia política antiimperialista desde la perspectiva de lo político de reivindicar la soberanía del País; de reivindicar la independencia y el desarrollo de la revolución venezolana”

                 Destacó que el nivel de la lucha antiimperialista ha tenido un desarrollo “”inmenso”” en la conciencia del pueblo venezolano, poniendo énfasis en que “”así como ha madurado la conciencia antiimperialista en el nivel político, nosotros no hemos logrado como fuerza revolucionaria del proceso, avanzar en que madure la conciencia socialista en el pueblo… que implica plantearse transformaciones profundas de la realidad económico, social, cultural y política de Venezuela y no solo defendernos frente al imperialismo…

                … Por eso el PCV junto a otras fuerzas “”hemos decidido no seguir pidiendo que hay que construir una dirección colectiva de la revolución sino empezar a construirla, empezar a concebirla con el pueblo,  con el movimiento popular, con los sectores revolucionarios, desde una práctica concreta, desde la base, desde el movimiento popular establecer la necesidad de esa dirección”

Tanto estos países como otras naciones del área, por la diversidad de acontecimientos que bajo circunstancias dispares sufrieron, nos aportan una gran variedad de argumentos, suficientes para averiguar con que falta de rigor se han comportado cada uno de sus líderes, que pese a su buena voluntad, no supieron culminar sus procesos revolucionarios en aquellos casos, en los que pudieron al menos iniciarlo. Al conocedor de la historia de América Latina le puede producir sentimientos de frustración insuperable, cuando constata que en anteriores períodos, otros países y otros líderes pasaron por trances similares. En el recuerdo nos quedan figuras de las tallas de Perón en Argentina, de Velazco Alvarado y Alan García en Perú, de Goulart en Brasil y de Allende en Chile. La guerrilla del Che en Bolivia, el FMLN en el Salvador, Fuerzas Armadas de Liberación Nacional venezolana, Fuerzas Armadas Rebeldes limeñas, el MIR guatematelco, los guerrilleros de Torres en Colombia, Asociación Cívica Nacional Revolucionaria mexicana, los Tupamaros en Uruguay, montoneros argentinos, MIR en Chile, Unidad Revolucionaria Nacional Guatematelca, FARC en Colombia, Sendero Luminoso en Perú y un largo etc.

Las preguntas se nos agolpan en la mente por la imposibilidad de hallar respuestas que nos acerquen a la comprensión de determinadas actitudes duplicadas. ¿Acaso, no son bastantes ricas y tajantes las extraordinarias experiencias de Chile y Nicaragua, como para desdeñarlas a la hora de analizar la revolución bolivariana en Venezuela? Ya tenemos un indicio positivo que nos depara optimismo al saber que el Parido Comunista de Venezuela (PCV) ha tenido la voluntad y también la capacidad para abordar el problema de la revolución, antes de que sea demasiado tarde, como le sucediera al Partido Comunista de Chile.

 Un rasgo distintivo del periodo actual abre puertas a la esperanza; aunque con total improbabilidad, salvo en Venezuela, de soñar con la emancipación de las clases trabajadoras, pues el socialismo deja de ser un objetivo a alcanzar. A diferencia de los años 70 y 80 del siglo pasado, en estos momentos se dan condiciones más favorables para que prosperen políticas colectivas antiimperialistas. Los países han superado barreras de todo tipo para que en un plazo mediano, pueda consolidarse planes económicos y estratégicos comunes, que beneficiarían al mantenimiento del socialismo en Cuba y pueden también, contribuir a neutralizar a los imperialismos en sus intentos de obstaculizar e intervenir negativamente en el proceso revolucionario de Venezuela.

Si anteriormente los grupos revolucionarios intentaban a través del sistema focal, que prendiera la insurrección popular que nunca tuvieron lugar; ahora en cambio, son los pueblos movilizados los que empujan hacia los gobiernos a sus líderes.

Desde el año 2000 las acciones populares antiimperialistas en América del Sur, es un fenómeno constante. La Guerra del Agua protagonizada por el pueblo boliviano culminó con una huelga general insurreccional, para abatir al gobierno de Sánchez Losada que contaba con el respaldo de EE.UU.

En los acontecimientos de Bolivia tuvieron un protagonismo destacado los mineros, campesinos, estudiantes, y las etnias indígenas quechuas, aymaras y cambas. El pueblo boliviano recurrió a todo tipo de lucha hasta lograr la nacionalización de los hidrocarburos, principal riqueza del país, auspiciando la llegada de Evo Morales al gobierno. La pelea tuvo un gran contenido antiimperialista, al proteger sus riquezas autóctonas de la expoliación por parte de empresas multinacionales foráneas.

También las luchas del pueblo argentino que tuvieron comienzo el 9 y 20 de diciembre de 2001, preocupó de manera especial al estado norteamericano por su contenido popular. Por otro lado y pese al apoyo del capitalismo internacional a los gobiernos de Colombia esto no han logrado vencer a la guerrilla. Por su parte, la actitud de los trabajadores de las industrias y del campo, dirigidas  por la Central Nacional de Trabajadores y por la Federación Nacional Campesina, ofreciendo gran resistencia frente al gobierno de Paraguay, han impedido que se llevara a cabo las privatizaciones que exigía la estrategia del FMI imperialista. En Perú y en Uruguay se dieron levantamientos populares para frenar privatizaciones de carácter imperialista.

Es indudable que entre los pueblos de América Latina ha crecido considerablemente el odio al imperio, materializándose en huelgas e insurrecciones la reacción a las políticas pro yanqui. Mucho tiene que ver con estas luchas antiimperialistas, los triunfos de la nueva generación de líderes de izquierda y progresistas.

Las bases están dadas para emplear medidas colectivas antiimperialistas en América Latina. Sus gobiernos están obligados por mandatos de sus pueblos a diseñar las formas y a dotarlas de contenido.

Al mismo tiempo que nos vemos en la obligación de reconocer, que tanto las fuerzas productivas en muchas de las naciones citadas no han prosperado lo bastante para abrazar al socialismo, es lógico, por tal motivo, que sus pueblos no hayan adquirido aún, la conciencia de la necesidad de un cambio social de tal calado. Pero, inequívocamente también, hay que resaltar que los pueblos manifiestan con sus luchas antiimperialistas la vocación de alcanzar una democracia de carácter antilatifundista y antimonopolista, que en su desarrollo gestará la evolución adecuada de las fuerzas productivas, en la economía, en la política y en la conciencia de las clases trabajadoras para acceder posteriormente al socialismo, sin interrupción entre etapas. Ese es el mandato, esa es la necesidad vital de América Latina, ese es el problema cardinal al que se enfrentan sus líderes que se ven abocados a la tesitura  de las transformaciones sociales, o a la postre a la sumisión al imperialismo, la perpetuación de la dependencia y de la pobreza.

 

DEUDA EXTERIOR

Fidel Castro ha dicho: “La deuda externa es uno de los mayores obstáculos para el desarrollo y una bomba más, lista para estallar bajo los cimientos de la economía mundial en cualquier coyuntura de crisis económica. Hoy más que nunca, se hace evidente que la deuda es un problema político y por tanto, exige una solución política. No se puede seguir ignorando que se trata de un asunto cuya solución tiene que venir fundamentalmente de quienes tienen en los recursos y el poder parea ello: los ricos”.

La situación de endeudamiento en América Latina, tiene su origen más en una política financiera del imperialismo concebida para atenazar a los gobiernos, que por necesidad de salir de la penuria económica y de atraso

Durante la década de los 80 del siglo pasado los bancos estadounidenses, después de ofrecer préstamos a cuenta gota sobre operaciones concretas y debido a la acumulación de grandes cantidades de dólares en reservas, proceden a la liberación de los préstamos, otorgando créditos en operaciones sin límites, que son aprovechados por los gobiernos latinoamericanos, para emplearlos en gran medida en invertir en transacciones comerciales no rentables: préstamos a fondo perdido para empresas extranjeras con el propósito de que se instalen en sus territorios; presupuestos para tapar huecos producidos por las empresas públicas, también destinados a adquirir armamentos sofisticados y cuando no, el dinero era objeto de especulación y absorbido por una aberrante corrupción, bastante generalizada institucionalmente en toda América Latina.

El fenómeno de la dependencia financiera suponía la supeditación absoluta a los bancos extranjeros, que se permitían el lujo de subir caprichosamente los intereses con los que procuraban financiar las pérdidas de los países desarrollados. Táctica que tuvo consecuencias agravantes, porque los grandes capitalistas de la región evadían sus capitales hacia el mundo desarrollado, particularmente a los EE.UU. a costa de hundir más las economías de sus países de orígenes.

Muchas naciones se deslizaron a través del lodazal hasta el borde de la bancarrota. Otros como en el caso de Méjico la crisis paraliza la vida económica y no puede ya pagar un centavo de su deuda externa.

Se dieron las condiciones para la intervención del FMI y del Banco Mundial, que expresan los intereses de los imperios, forzando a los gobiernos deudores por medio de prestamos con tasas a bajo interés, a llevar a cabo políticas devoradoras, que ahondan en la dependencia por dos caminos convergentes: el control de la inflación y la privatización del sector público, casi siempre a favor de capitales extranjeros.

Es decir, la salida que se ofrece es el saqueo de las riquezas autóctonas, que simultáneamente marcaba el ritmo del empobrecimiento de la población laboriosa, obligada a soportar la merma considerable de su poder adquisitivo, por medio de la bajada del salario real y por medio de la subida de interés de los préstamos bancarios, con  el fin de “controlar la inflación”.

El pago de la deuda externa ahoga a los países y les impiden salir de la situación de subdesarrollo. Tenemos que Brasil destinó durante 2004 mas de 190 mil millones de reales para el pago de la deuda,  mientras dedicaba 91 mil millones para seguridad pública, asistencia social, salud, educación, cultura, urbanismo, hábitat, saneamiento, gestión ambiental, ciencia y tecnología, agricultura, reforma agraria, energía y transporte. Por su parte el pago que efectuó Colombia para mitigar su deuda en 2005 equivale al 33% de su Presupuesto Nacional. También Argentina en el 2005 empleó 18.600 millones de pesos para ir saldo su deuda, siendo ésta la cantidad que precisaría para sanear educación, trabajo, vivienda, agua potable y salud. Ecuador en el mismo año utilizó el 45% de su presupuesto para liquidar parte de la deuda, es decir, 11.300 millones de dólares

 

LUCHA DE LOS IMPERIOS POR ACAPARAR EL MERCADO LATINOAMERICANO

                La situación actual de los países latinoamericanos es la inferencia directa de la política imperialista de aquellos años, que se afianza con la participación de las oligarquías nacionales. La depauperación paulatina, pero insoportable de los pueblos, impulsa el gran éxodo de las fuerzas de trabajo a EE.UU y a Europa, preparando condiciones para promocionar salarios esclavizantes, que constituye un reclamo para la codicia de las multinacionales, las que acuden al reino de la facilidad pasando a controlar los sectores industriales básicos, el energético, el minero, el de la comunicación.

Endeudamiento, mano de obra barata y riqueza autóctona apetecible, conforman un mercado atractivo, por el que los países imperialistas están dispuestos a disputar.

Al tiempo que los imperios discurren por la senda de la expansión irrefrenable, por su carácter egoísta, implementan el brote incontrolable también, de situaciones contradictorias que producen incisiones de gran importancia, que nos recuerdan que en los mundos de la política, de la economía y en el de lo militar, no se da la infalibilidad absoluta. Cada momento histórico presenta características nuevas o contradicciones más pujantes en el sistema capitalista a pesar de su renovadora capacidad para sobreponerse.

En el mundo contemporáneo, nuevos países emergen con capacidad para retar y competir por los mercados a  los EE.UU. Japón y Europa. En esta ocasión el auge económico que experimenta China pone a prueba a través de nuevas contradicciones la capacidad resolutoria de los imperios tradicionales, ocasionándoles crisis más agudas, dado el volumen de demanda y de oferta desaforado del nuevo coloso de la economía.

 

CHINA

Hace unos años China incrementó extraordinariamente el consumo de acero. Desde entonces su demanda de chatarra para su elaboración viene siendo insoportable para la acería europea. Paradójicamente las industrias chatarreras del continente, prefieren en ocasiones, vender en exclusiva la casi totalidad de su producción a China a costa de desabastecer el mercado europeo, originando una situación al borde del colapso. A su vez los EE.UU. desvía también hacia China sus materias primas que anteriormente tenía el destino de Europa.

De haber evolucionado esta tendencia en la progresión inicial incomprensible para los intereses de Europa y EE.UU. hubiese provocado una crisis estructural y económica en Occidente de incalculable consecuencia. Previsora hasta extremos insospechados por sus adversarios, China se dispuso a construir en Brasil los Altos Hornos de mayor capacidad productiva del mundo, desde donde piensa abarcar el mercado occidental.

El trato que recibe América Latina de Europa y EE.UU. abre brechas, por donde se introduce China, dando por ahora pequeños respiros a las asfixiantes economías, por el coste barato de sus productos. Empresas chinas dedicadas a la fabricación de coches han comenzado a vender vehículos en Venezuela. También exportan camiones y minibuses  a Ecuador y Guatemala.

Las relaciones chinas-América Latina han ido acentuándose  y la balanza comercial entre ambos se desliza favorablemente al país asiático, como lo demuestra que durante los primeros cinco meses de este año, China exportó bienes por valor de $12,400 millones a América Latina, mientras que importó bienes por $11,400 millones de la región, según datos del Departamento de Comercio de China.

Pero China, tiene intereses creados en Latinoamérica, porque necesita de ésta, materias primas para sus industrias, condenando a la región a mantener como sostén de su economía, la industria extractora. Si China no se decide a importar más de otros productos de Latino América, puede contribuir a la perpetuación de las actuales estructuras económicas de la región.

 

EUROPA

Europa y dentro de ella España, exporta el 15,4% del total de los productos importados por América Latina. En cambio, las inversiones y el asentamiento de empresas europeas (Repsol, Telefónica, Gas Natural, BBVA, Iberdrola..) también, otras pertenecientes a Reino Unido, Holanda, Francia, Italia, Portugal y Alemani, ha ido creciendo constantemente desde 1.990. De las 10 empresas más importantes de la zona 7 son europeas.

España y Portugal, debido a las enormes dificultades competitivas de la UE, se fijaron en Latino América, realizando sucesivas inversiones colosales, obteniendo compensaciones bajo el principio de la usura extraordinarias. (telefónica, Repsol, Electricidade de Portugal, Portugal Telecom, Sonae de Distribuicao..) Estas empresas tienen ingresos en Latinoamérica del 32% de sus ingresos totales. Telefónica de España es con diferencia la máxima inversora en telecomunicaciones en América Latina.

Francia y Alemania plantean sus inversiones en la industria de la automoción y de gran consumo (Crysler, Renault, Volkswagen, Danone, Parmalat, Unilever, etc.) que obtiene alrededor del 10% de sus beneficios consolidados.

La conducta de las empresas europeas en América Latina, están acompañadas de la depredación irracional y por la vulneración de los derechos humanos.

                Alianza Social Continental, miembro de la Red Birregional Unión Europea-América Latina, va a someter a juicio  a partir de Mayo del 2008 en Perú a las empresas transnacionales por su incidencia negativa en América Latina y el Caribe, además de las Instituciones Financieras internacionales que las financias, como también las clases capitalistas locales que legalizan sus acciones y se benefician de ellas Entre las empresas que serán juzgadas se encuentran Unión Fenosa, Suez, Repsol-YPF, Telefónica, Endesa, BBVA y el Banco Santander acusadas, por el saqueo, depredación, apropiación y contaminación de los recursos naturales, riquezas, tierras y vidas.

 

EE.UU

Los EE.UU. exportan a Latinoamérica el 44,8% del total de las importaciones de estos países. ¿Pero cuales son los intereses de los EE.UU. en América Latina?

En lo que se refiere a la política, trata de evitar el “antiimperialismo” fecundo en toda el área y en nombre de la libertad y de la democracia, recurriéndola asesinato de los lideres sindicales, alimentando a las fuerzas paramiliatares a realizar sus acciones delictivas y criminales, interceptar las apariciones de los líderes “populistas” que llevan el contagio en sus acciones, pero, lo que más le entretiene, es la búsqueda de fórmulas para acabar con el socialismo en Cuba.

En lo militar consiste en impedir que cualquiera de los imperios que pueda restarle parte de sus influencias. A los EE.UU. le preocupa enormemente la presencia de China en la zona, a la que vigila estrechamente. Aunque sin duda son Colombia, Cuba y Venezuela las naciones que centran toda su atención y han pasado a ser su máxima preocupación.

Aunque Estados Unidos tiene relaciones militares con la mayoría de los países latinoamericanos y caribeños, las tiene con especial interés con los pocos países de la región que producen connotaciones directas sobre los intereses estratégico-militares de EEUU. Como es el caso de Colombia, cuya estabilidad significa mucho para  los intereses  de EEUU  en  América  Latina.  A  juzgar  por los estrategas estadounidenses se teme         que la inestabilidad en Colombia, en relación con las guerrillas, supere las fronteras del país y comprometa a sus vecinos Bolivia, Ecuador, Perú y Venezuela, todos ellos proveedores actuales o futuros de energía a Estados Unidos, fundamentalmente Venezuela.

En el área de la economía y bajo la denominación del libre comercio, (ALCA) aspira a someter a cada una de las naciones del continente bajo sus férulas, para neutralizar cualquier incisión proveniente de los otros imperios.

Naturalmente, el ALCA, ha sido ideada, con el fin de mantener eternamente la dependencia de América Latina con respecto a EE.UU. y de asegurar la rentabilidad de sus inversionistas. El ALCA,  contiene una serie de puntos de sometimiento, a saber: Inversiones, Política de competencia, Propiedad intelectual, Acceso a mercados, Servicios, Compras gubernamentales; Solución de disputas, Agricultura, Subsidios, antidumping y salvaguardas.

De conseguir sus objetivos, con el ALCA, los EE.UU. da un paso de gigantes en la utilización de las reservas energéticas del continente americano.

 

ALTERNATIVAS AL IMPERIALISMO

Al resumir la situación estructural de Latino América, la contradicción mas flagrante que nos encontramos es la que existe entre el volumen de sus riquezas autóctonas y la pobreza que reina entre las clases trabajadoras.

                La mayor parte de las riquezas están en manos de burguesías extranjeras que se caracterizan por su depredación económica, desdeñando los derechos humanos y por su crueldad represiva., recurriendo al asesinato cuando lo consideran oportuno. Tal es el caso de Coca Cola en Colombia y otros lugares.

                Europa y los EE.UU. con serios intereses en la zona, estrangulan los gobiernos por medio de la deuda externa que es la usura al máximo exponen. La deuda obliga a los gobiernos apelar al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial, que les conceden créditos a bajo interés; a cambio, de privatizar las empresas públicas y corregir la tasa inflacionaria, que a modo liberal, quiere decir, reducir los salarios.

                Esta es la razón, por la que líderes progresistas, sin sentimientos comunistas se estrellen, a la hora de llevar a cabo medidas, que redunden en beneficios de las clases más desfavorecidas. La presión económica y política y llegado al caso militar, le persuaden para que renuncien a sus intenciones prístinas. Se decía que Kirchner, cuando tenía que negociar la deuda con el FMI adoptaba una actitud crecida, pero al final terminaba cediendo. Las instituciones financieras de alcance mundial poseen recursos persuasorios casi infalibles.

                Pero también sucede que gobiernos reaccionarios se prestan a los dictados de Norteamérica y otros, disfrazados de progresía arremeten contra sus pueblos, con el señuelo de liquidar el terrorismo (Kirchner.)

Como elemento dinamizador tenemos que las crisis imperialistas, las contradicciones que de ellas emanan sin cesar, ayudan a la aparición sucesiva de las condiciones precisas para que el rumbo de los acontecimientos empujen a la toma de posición contraria a los deseos del imperialismo, si la dignidad supera las flaquezas teóricas que parecen presidir en los líderes actuales.

Por desgracia MERCOSUR, al que se ha incorporado últimamente Venezuela, adopta posiciones, que en modo alguno vaticina el proyecto aglutinador antiimperialista. Mercosur, un área de libre comercio formado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela.

El pasado día 18 de diciembre, en tanto en Palestina, los israelíes perpetraban el asesinato de 13 palestinos en la franja de Gaza, en Uruguay se signaba un acuerdo de un TCL con Israel. Por lo que se ve los intereses prevalecen a los criterios de justicia y derechos humanos en MERCOSUR.  La pregunta es ¿Podrá el gobierno de Chávez darle la vuelta a MERCOSUR?

Un proyecto aglutinador multinacional semejante al del ALBA, propuesto por Chávez, podría constituir el punto de partida, si los países son capaces de liberarse de las influencias económicas y políticas de los EE.UU. de Europa y de los FMI y BM, lo que parece bastante improbable para muchos por ahora.

La Alternativa Bolivariana para las Américas, (ALBA) es obra de Venezuela y Cuba (Chávez y Fidel), que junto con una política antiimperialista en el plano económico en el interior de los países, debería ser un buen fundamento para contrarrestar las acciones super codiciosas de las Instituciones multilaterales como el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Interamericano de Desarrollo y la Corporación Andina de Fomento.

A prometer Chávez cubrir al 100% las necesidades energéticas de los países integrantes del ALBA (Nicaragua, Cuba, Bolivia y Haití) es indudable que se efectuarán cambios extraordinarios en el ámbito político y económico de la región.

Según un documento oficial del Ministerio de Estado para la Integración y el Comercio Exterior las bases del ALBA son:
1. La integración neoliberal prioriza la liberalización del comercio y las inversiones, en cambio la Alternativa Bolivariana para América Latina (ALBA) es una propuesta que centra su atención en la lucha contra la pobreza y la exclusión social.
2. En la propuesta del ALBA se le otorga una importancia crucial a los derechos humanos, laborales y de la mujer, a la defensa del ambiente y a la integración física.
3. En el ALBA, la lucha contra las políticas proteccionistas y los ruinosos subsidios de los países industrializados no puede negar el derecho de los países pobres de proteger a sus campesinos y productores agrícolas.
4. Para los países pobres donde la actividad agrícola es fundamental, las condiciones de vida de millones de campesinos e indígenas se verían irreversiblemente afectadas si ocurre una inundación de bienes agrícolas importados, aún en los casos en los cuales no exista subsidio.
5. La producción agrícola es mucho más que la producción de una mercancía, es la base para preservar opciones culturales, es una forma de ocupación del territorio, define modalidades de relación con la naturaleza, tiene que ver directamente con la seguridad y autosuficiencia alimentaria. En estos países la agricultura es, más bien, un modo de vida y no puede ser tratado como cualquier otra actividad económica.
6. ALBA tiene que atacar los obstáculos a la integración desde su raíz, a saber:
a. La pobreza de la mayoría de la población;
b.Las profundas desigualdades y asimetrías entre países
c. Intercambio desigual y condiciones inequitativas de las   relaciones internacionales
d. El peso de una deuda impagable
e. La imposición de las políticas de ajuste estructural del FMI y el BM y de las rígidas reglas de la OMC que socavan las bases de apoyo social y político.
f. Los obstáculos para tener acceso a la información, el conocimiento y la tecnología que se derivan de los actuales acuerdos de propiedad intelectual; y,
g. Prestar atención a los problemas que afectan la consolidación de una verdadera democracia, tales como la monopolización de los medios de comunicación social
7. Enfrentar la llamada Reforma del Estado que sólo llevó a brutales procesos de desregulación, privatización y desmontaje de las capacidades de gestión pública.
8. Como respuesta a la brutal disolución que éste sufrió durante más de una década de hegemonía neoliberal, se impone ahora el fortalecimiento del Estado con base en la participación del ciudadano en los asuntos públicos.
9. Hay que cuestionar la apología al libre comercio, como si sólo esto bastara para garantizar automáticamente el avance hacia mayores niveles de crecimiento y bienestar colectivo.
10. Sin una clara intervención del Estado dirigida a reducir las disparidades entre países, la libre competencia entre desiguales no puede conducir sino al fortalecimiento de los más fuertes en perjuicio de los más débiles.
11. Profundizar la integración latinoamericana requiere una agenda económica definida por los Estados soberanos, fuera de toda influencia nefasta de los organismos internacionales.
Ya existen datos muy positivos sobre la actuación del ALBA en el campo de la energía. Daniel Ortega ha dicho, que debido a este organismo, Nicaragua ha incorporado 60 megawatts de potencia eléctrica en pocos meses, todo lo contrario de lo que ha ocurrido hasta ahora bajo la tutela de los EE.UU. que en 16 años no se pudo sumar un solo megawatts.

Otro paso decisivo llevado a cabo por Hugo Chávez, es la constitución del Banco del Sur. El día 3 de Mayo, los Ministros de Economía de Argentina, Brasil, Bolivia, Ecuador, Paraguay y Venezuela se reunieron en Quito para concretar dicho organismo. Un proyecto alentador que brinda la posibilidad de financiación rápida proyectos de infraestructura y desarrollo.

Podremos concluir que se vislumbran grandes cambios en la zona, en las relaciones comerciales y financieras de los países, pero sobre todo un cosa muy importante, es que se han dado pasos sólidos y extraordinarios para sustentar el antiimperialismo de los pueblos de forma colectiva, de lo que se trata es de que las intenciones realmente transformadoras de Chavez, se traduzca en algo positivo en el interior de las naciones aliadas. De consolidarse el ALBA y de seguir adelante el proyecto del Banco del Sur, la revolución cubana, puede comenzar a respirar.